Hoy, día de la Merced, en la que tantos jóvenes de hermandades jerezanas emplean sal teñida de colores diversos para tejerle de cariño alfombras a su Patrona, me he acordado de ese versículo del evangelio de San Mateo: “Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué laSigue leyendo «SAL DE LA TIERRA PARA LA MERCED»